Nacimos como un espacio en el cual pudieramos ofrecer al público amplia diversidad de elementos sólo limitado por nuestro propio gusto y apetencias artísticas. Por eso La menesunda, la mezcla, lo ecléctico. Y aprovechamos a homenajear con nustro nombre a la primera exposición de La Minujín en el Instituto Ditella.
En nuestros locales tratamos de unir la exibición de productos para la venta con un clima agradable, entre amigos, combinando cosas bellas con buena música, en un lugar apasible, sin estridencias y con buena energía.